Phil Lynott y su relación con los estupefacientes

«Sueña para siempre, sueño de algodón» cantaba Yosi, pero el propio Phil Lynott no parecía estar de acuerdo con esta afirmación.

Justo tras editar Black Rose en 1979 pasó por Frankfurt y estuvo con Cookie, el promotor más importante de la ciudad. Por aquellos entonces, Thin Lizzy tocaban en Zoom Club, ahora desaparecido, y el promotor recuerda cómo tras cerrar la discoteca, a eso de las seis de la mañana, se fue a su casa con Lynott y desayunó a eso de las nueve con el cantante y bajista. Ya tenía claro el mulato que «van a ser tres días de fiesta salvaje».

Pasado el fin de semana, Classic Rock Mag le llamaba para entrevistarle sobre el mencionado disco. Lynott respondía que «soy un poco cínico al escribir una letra como la de la canción «Got to give it up», ya que cuántas veces decimos que vamos a dejar algo y no lo hacemos. Es algo perpetuo y no puedes eliminar ese hábito. Intento ser honesto en la letra, como en «With love». Quería escribir una canción de amor y digo, más o menos, «los días de Casanova se han terminado». Creo que muestra mi parte más humana».

«Cuando estaba componiendo esos temas intenté capturar cómo me sentía. Quería expresarme así. Son contradicciones honestas. Si mi vida fuera blanco o negro, o si fuera una vida estándar, sería más fácil componer. No tendría que pelearme con las letras. Solo tendría que decir «te quiero y el cielo es azul». No es así. Todo es más complicado. «Got to give it up» tiene que ver con aparcar algunos hábitos cuando sabes que no tienes la menor oportunidad de hacerlo».

«No creo que esa canción tenga relación solo conmigo, sino también con mucha gente. Intento, con la máxima sinceridad, dejar las drogas por un tiempo. Se por qué los músicos las toman y es para experimentar y para llegar al límite. ¿Por qué la gente escala montañas? Para llegar a su propio límite. La gente quiere llegar al extremo, pero si llegas hay que estar preparado para caerse como lo han hecho ya tantos».

«Hay personas que no necesitan las drogas para nada, pero los artistas sí. Algunos escriben sobre su experiencia y otros no. Me encantaría escuchar algún tema de Hendrix donde comentase su experiencia o de Elvis. Ahora no es así. Yo, por ejemplo, no tomo ningún tipo de droga». Que su autoengaño sirva de ejemplo a los que consideran que los estupefacientes son la solución a sus problemas.

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